Este queque de manzana es una combinación perfecta de esponjosidad y sabor, con un toque de dulzura natural que proviene de la fruta fresca. El aroma de la manzana se mezcla con la calidez de la canela, creando una experiencia reconfortante y casera. Ideal para compartir en una tarde fría, con una taza de té o café, este queque no solo satisface el paladar, sino que también envuelve el hogar con una atmósfera acogedora y hogareña
A disfrutar de esta delicia de queque de manzana
Ingredientes:
Para el queque:
2 tazas de harina de trigo
1 taza de azúcar
1/2 taza de mantequilla, a temperatura ambiente
3 huevos
1/2 taza de leche
1 cucharadita de extracto de vainilla
1 cucharadita de polvo de hornear
1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio
1/2 cucharadita de canela en polvo
1 pizca de sal
2-3 manzanas, peladas y cortadas en cubos (pueden ser manzanas verdes o rojas)
Jugo de 1 limón (opcional, para las manzanas)
Instrucciones:
Precalentar el horno: Precalienta el horno a 180°C (350°F). Engrasa y enharina un molde para queque.
Mezclar ingredientes secos: En un tazón, mezcla la harina, el polvo de hornear, el bicarbonato de sodio, la canela y la sal. Reserva.
Batir la mantequilla y el azúcar: En otro tazón grande, bate la mantequilla con el azúcar hasta que la mezcla esté cremosa y suave.
Agregar los huevos y la vainilla: Incorpora los huevos, uno a uno, batiendo bien después de cada adición. Luego, añade el extracto de vainilla.
Incorporar ingredientes secos y la leche: Agrega la mezcla de harina alternando con la leche, comenzando y terminando con la harina. Mezcla hasta que esté bien combinado.
Añadir las manzanas: Si deseas, rocía las manzanas con jugo de limón para evitar que se oscurezcan. Incorpora las manzanas en la mezcla suavemente.
Verter en el molde: Vierte la mezcla en el molde preparado, alisando la superficie.
Hornear: Hornea durante 45-55 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro, este salga limpio.
Dejar enfriar: Deja enfriar el queque en el molde durante 10 minutos, luego retíralo y déjalo enfriar completamente sobre una rejilla.
Servir: Puedes espolvorear con azúcar glas antes de servir, si lo deseas. Disfruta tu queque de manzana solo o con un poco de helado o crema batida.
¡Espero que lo disfrutes!