Estos kibbes individuales aunque nació en el Medio Oriente, hoy lo encontramos en cocinas de todo el mundo, incluyendo la tuya. Dorados y crujientes por fuera, jugosos por dentro, son perfectos para compartir, llevar a una reunión o simplemente darte un gusto. Lo mejor es que no necesitas ser chef ni tener ingredientes raros, solo ganas de cocinar algo diferente, sabroso y con historia
Sabor que abraza el alma y conquista el paladar, así son estos Kibbes individuales
Ingredientes:
Para la masa:
500 g de carne molida de res (preferiblemente magra)
1 taza de trigo para kibe (bulgur fino)
1 cebolla mediana rallada o muy picada
1/2 taza de hojas de hierbabuena (menta) fresca picada (opcional pero tradicional)
1/2 taza de perejil fresco picado
Sal al gusto
Pimienta negra al gusto
1/2 cucharadita de comino
1/2 cucharadita de canela (opcional)
Agua fría para remojar el trigo
Para el relleno:
250 g de carne molida
1 cebolla picada finamente
2 cucharadas de aceite de oliva o manteca
Sal y pimienta al gusto
1/2 cucharadita de allspice (o mezcla de canela, clavo y nuez moscada)
Nueces o piñones picados y tostados (opcional)
Para freír:
Aceite vegetal en cantidad suficiente para freír por inmersión
Instrucciones:
Remojar el trigo:
Lava el trigo bulgur y remójalo en agua caliente durante 30 minutos.
Luego escúrrelo muy bien y exprímelo con un paño de cocina para quitar el exceso de agua. Debe quedar lo más seco posible.
Preparar la masa:
En un bol grande, mezcla el trigo escurrido con los 500 g de carne molida.
Agrega la cebolla rallada, la menta, el perejil, sal, pimienta, comino y canela.
Amasa todo con las manos hasta obtener una mezcla homogénea, suave pero firme. Puedes pasarla por el procesador si quieres una textura más fina.
Preparar el relleno:
En un sartén, sofríe la cebolla en el aceite hasta que esté transparente.
Agrega la carne molida y cocina hasta que se dore.
Añade sal, pimienta y especias. Incorpora los frutos secos si los estás usando.
Cocina hasta que esté bien seco (sin líquidos). Deja enfriar.
Formar los kibbes:
Humedece tus manos con agua fría.
Toma una porción de masa (como del tamaño de una pelota de golf).
Haz una cavidad en el centro con el dedo y ve moldeando hasta formar una especie de cono hueco.
Rellena con un poco de la carne cocida.
Cierra cuidadosamente y forma una especie de torpedo (puntiagudo en los extremos).
Repite con toda la masa y el relleno.
Freír:
Calienta suficiente aceite en una olla o sartén profundo.
Fríe los kibbes por tandas, sin llenar la olla, a temperatura media-alta hasta que estén dorados y crujientes.
Escúrrelos en papel absorbente.
¡Preparado!
¡A disfrutar!
Consejos:
Si no vas a freírlos de inmediato, puedes refrigerarlos o incluso congelarlos.
Asegúrate de que el relleno esté completamente frío antes de armar los kibbes.
Para kibbes individuales (como los que vas a freír), lo ideal es usar:
Trigo burgol fino (bulgur fino)
También lo puedes encontrar como:
Trigo para kibe
Burghul fino
Triguilho (en Brasil)
Evita el burgol grueso para esta receta, porque no se compacta bien en la masa.